miércoles, 18 de octubre de 2023

¿Cuándo llegaste a Querétaro? - Por Omar Castrejón

Mi familia llegó a vivir por segunda vez a #Querétaro en 1990 pues mi padre que fue constructor retomó aquí su empresa y tuvo oportunidades de trabajo; yo llegué como un joven de 18 años a continuar estudiando en una ciudad que de momento me parecía poco entretenida y a la que no le agarraba todavía el sabor. 
Era un Querétaro muy distinto, una ciudad pequeña en la que había pocas cosas que hacer y en la que parecía que todos los que aquí vivían se conocían.
No fue fácil para mí adaptarme de hecho creo que nunca lo hice en ese sentido del todo, pero al igual que mi familia con el paso de los años muchas otras familias también llegaron a vivir a Querétaro y cuando nos dimos cuenta Querétaro comenzó a sentirse diferente, podíamos apreciar lo rico de su historia y las tradiciones de antaño mientras veíamos como rápidamente se convertía en una ciudad más dinámica, con mucho desarrollo, con una gran oferta cultural, comercial, de entretenimiento y muchas cosas atractivas de las grandes ciudades pero sin padecer lo desagradable como la inseguridad, la contaminación, las grandes distancias y el pesado tránsito. 
Pero eso fue hace más de 30 años cuando la población de todo el estado era de menos de 400,000 habitantes, hoy somos más de 2 millones de los cuales un millón y medio vivimos en la capital y su zona conurbada.
Querétaro se convirtió en el mejor lugar para vivir del país para quienes al igual que los queretanos de muchas generaciones llegamos aportando patrimonio, capacidad y trabajo para construir el extraordinario Querétaro que es hoy en día y al que muchísimas personas en todo México tienen ganas de hacer su hogar también. 
La gran mayoría de los que vivimos en Querétaro sabemos que es un gran privilegio y sin menospreciar a otros estados y ciudades difícilmente podríamos pensar en otro lugar en México en el que quisiéramos vivir, pero al igual que todo lo que vale la pena también implica hacer esfuerzos considerables, estamos en un momento de renovación, mucha de la infraestructura y sistemas de la ciudad están alcanzando su capacidad y si no se hacen hoy las intervenciones profundas y de gran alcance necesarias para las próximas décadas ese Querétaro al que le hemos apostado todo para que nuestras familias puedan vivir con paz, prosperidad y felicidad dejará de existir. 
Hay mucho, muchísimo que podemos hacer todos en beneficio de los demás y de nosotros mismos además de quejarnos y sucumbir ante la frustración y el enojo, recordemos que hay quienes lucran sembrado todos los días discordia, división y odio, no les hagamos el juego y mejor pensemos qué podemos hacer para mejorar nuestras propias circunstancias y demos propuestas para mejorar la vida de todos comenzando desde nuestro entorno más cercano hasta quien esté en el punto más distante de esta maravillosa tierra que nos ha dado tanto. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Agradezco como siempre tus amables opiniones y comentarios así como la gentileza de compartir el artículo si te parece interesante y fue de tu agrado.